Pont-à-Bar es una muy pequeña aldea, fué fundada durante la construcción del Canal de Ardenas durante el siglo pasado. Desde su puerto perqueño rodeado de casas típicas locales podrá apreciar la gran diversidad de paisajes a medida que navegue a lo largo de los prados de Meuse y los legendarios bosques de Ardenas ...
A unos 10 km se llega a través de la ciudad de Sedan. Hoy en día es una ciudad de arte e historia, Sedán, y, en particular, su casco antiguo, posee una arquitectura impresionante. Disfrutar de un descanso en el Charleville Mézières donde podrá visitar el zoo en el que, sin duda, merece ver jabalíes, ciervos, corzos y aves. Para los que le gustan los museo, le interesará ver la pena el museo Ardena donde descubrirá sus tesoros ocultos de historia y arqueología.